La intervención se realizó en un edificio de dos alturas de los años 50. Demolimos los antiguos forjados y se construyeron de nuevo con una estructura mixta, añadimos una nueva planta sobre la altura original que mantiene la retícula compositiva y estructural del proyecto original. Para mejorar el rendimiento energético del edificio se aislaron las fachadas térmicamente con vidrio celular. Una nueva organización en las nuevas plantas posibilitó crear nuevos espacios adaptados al nuevo uso de la vivienda donde destaca el núcleo de la escalera por su solución arquitectónica. El resultado de la rehabilitación son dos viviendas, una independiente en la planta baja y otra que ocupa las plantas superiores.